Si Lisboa fuese una persona sería esa tía que visitamos poco pero que siempre nos recibe con un abrazo, un café calentito y una historia que contarnos mientras nos pregunta cómo estamos.
Buscar cosas que hacer en Lisboa no es difícil porque es una ciudad que cobija y a la vez ofrece miles de opciones para el viajero. A mi, personalmente, me atrae tanto que podría ir a vivir allí sin problemas.
Una de las cosas que más me sorprenden en España es que mucha gente no va a Lisboa porque “está aquí cerca”, como si la proximidad o la familiaridad le restara importancia. Pero es una ciudad con un encanto que enamora, donde se puede pasear sin molestar y sin que te molesten. Es un lugar que inspira, y si no me crees pregúntaselo a Fernando Pessoa.
Consejo Puedes hacer un tour gratis por Lisboa y luego decidir qué sitios volver a visitar.
Es realidad todo Portugal es una belleza. Uno de los países europeos más hermosos es sin duda Portugal, y su capital Lisboa es una preciosa ciudad cosmopolita, con excelentes accesos y además se encuentra a pocas horas de cualquier capital europea.
En esta espectacular ciudad hay tanto que ver y que hacer, que resulta difícil verlo todo y disfrutarla al máximo en una sola visita. Acá te presento una pequeña selección de lo que no te debes perder en la maravillosa capital portuguesa.
Consejo Si te interesa entrar gratis a museos o usar el transporte público sin pagar te recomiendo que uses esta tarjeta.
Si es la primera vez que visitas la ciudad vas a querer ir a estos sitios no solo porque te han hablado de ellos, sino porque te sorprenderán, te dejarán con la boca abierta y porque harán que te des cuenta que visitar la capital portuguesa ha sido un acierto total.
Visitar el Barrio Baixa
Un buen inicio al visitar este espectacular lugar, es comenzar por la Plaza de los Restauradores, donde encontrarás el maravilloso edificio del Hotel Edén. En esta Plaza comienza la avenida Liberdade, la más importante de Lisboa, que acaba en la Plaza del Marqués de Pombal, donde comienza la moderna Lisboa.
Al lado se encuentra la Plaza de Rossio con el Teatro Nacional y su famoso Café Nicola, éste es uno de los lugares con más vida en Lisboa. De aquí puedes visitar la Plaza Figueira con sus pintorescas casas abuhardilladas y la cual te ofrecerá una de las mejores vistas del Castillo de San Jorge.
Estas tres Plazas están muy cercanas unas de otras. De la Plaza Figueira sale la elegante calle peatonal Rua Augusta que a través del Arco del Triunfo se adentra en la Plaza del Comercio. Si estás cansado para hacer a pie esta ruta, puedes tomar el tranvía 12 y así podrás recorrer este maravilloso Barrio Caixa de manera cómoda.
Subir al Castillo San Jorge y pasear por Alfama
Si te encuentras en Lisboa y no visitas el Castillo de San Jorge te perderás de un momento totalmente inolvidable. Este es el punto más alto de la ciudad y se encuentra además en el medio de los barrios más típicos. Acá podrás sentir y comprender la unión de la ciudad con el Río Tajo.
También puedes disfrutar de un paseo por la Alfama, que es un antiguo barrio de pescadores con hermosas callejuelas, en donde debes caminar sin prisa y disfrutar al máximo. Para llegar hasta las puertas Castillo de San Jorge puedes tomar el tranvía 28.
Visitar Terreiro de Paco
Terreiro de Paco es la mayor Plaza de Lisboa y una de más emblemáticas, es el símbolo de la ciudad y de su reconstrucción después del terremoto de 1.755. Actualmente es un espacio muy agradable para pasear a orillas del río y disfrutar ver caer la tarde. También puedes tomar un paseo en barco por el río.
Subir en el Ascensor Santa Justa
Mientras recorres Baixa, llamará tu atención al pasar por él. Te ofrecerá vistas envidiables sobre esta parte antigua de Lisboa, además es un privilegio viajar en este antiguo ascensor que tiene más de cien años, y que fue diseñado por Ponsard, discípulo del gran maestro de las obras de hierro, Gustave Eiffel.
Disfrutar escuchando un Fado
Te guste o no este estilo de música, no puedes visitar Lisboa sin cenar a la luz de las velas mientras se escucha el Fado. Si tienes la suerte de oírlo al pasar por una calle cualquiera de Alfama, Mouraria o de Madragoa, aprovecha la ocasión.
El Fado aficionado o vadío se canta cuando apetece y las guitarras lo acompañan. Si quieres saber dónde o cómo escuchar fado en una tarde de Lisboa mira este sitio.
A mi el fado me encanta. Es la melancolía hecha música donde se puede apreciar la calidad de un cantante. Es belleza y emoción en una voz.
Viajar en un tranvía
El tranvía es el medio habitual de transporte de los habitantes de la ciudad, pero también es una de las mejores maneras de viajar y conocer los barrios históricos de la ciudad.
Queda bien en cualquier fotografía y el sonido del tranvía recorriendo las vías es uno de los más característicos de Lisboa. El número 28 es el más conocido, ya que llega a mucho de los puntos de más interés de la ciudad.
Visitar el Monasterio de los Jerónimos y la Torre de Belém
Lisboa cuenta con dos monumentos únicos considerados Patrimonios Mundiales, los cuales se encuentran en el espectacular Barrio de Belém. Son dos joyas del gótico manuelino que impresionan a todo el que los visita y admira.
Además de presentar las bóvedas trabajadas en piedra, que constituyen una admirable obra de ingeniería, la riqueza de los elementos decorativos que poseen relacionados con aspectos marítimos y de viajes de los navegantes, hace que resulten totalmente fascinantes.
En este Barrio encontrarás además el Puente 25 de Abril, el Monumento a los Descubrimientos y el Museo Nacional de los Carruajes. Puedes ver cómo asistir a un tour guiado a la torre en esta web.
Comer unos pasteis de Belém
Toda la gastronomía de esta maravillosa ciudad es exquisita y variada, y además cuenta con una maravillosa pastelería, podrás degustar platos ligeros, como también platos de alta cocina.
Puedes probar por ejemplo una rica Francesinha que es una especie de sandwich con jamón, embutidos, queso y huevos, acompañado con papás fritas y salsa, o también puedes visitar y comer en un Food Court de los muchos centros comerciales, donde la comida es muy buena y barata.
También puedes comer en una de las Tasquinhas de la Mouraria y degustar un Bacalau com nata o sentarte en un elegante restaurante y pedir uno de sus maravillosos platos.
Ahora bien, si lo que deseas es un rico postre puedes visitar alguna de sus pastelerías y probar por ejemplo un Pao de Deus, que es un bollito de crema de coco exquisito, o cualquiera de los postres que allí encuentres.
Lo que no puedes dejar de probar es el dulce más emblemático de la ciudad, los Pasteis de Belém, los cuales están hechos con una receta secreta muy bien guardada que los hace realmente únicos y deliciosos.
Disfrutar de una cena en Barrio Alto
Lisboa es mundialmente conocida por su animada y bulliciosa noche. Después de una tarde de compras en el maravilloso Barrio de Chiado, nada mejor que acabar el día en uno de los miradores, el de Santa Catarina o el de Sao Pedro de Acantara, y quedarse a cenar en Barrio Alto. Imprescindible si te gusta salir de noche y divertirte.
Visitar el Oceanario en el Parque de las Naciones
El Parque de las Naciones es un maravilloso ejemplo del éxito en la revitalización de una zona industrial, con un emplazamiento privilegiado a la orilla del río. Acá puedes visitar el Oceanario que es uno de los más grandes de Europa, en donde puedes admirar la fauna y la flora de los diversos océanos de nuestro planeta y además al salir podrás admirar también el colosal y moderno Puente Vasco de Gama.
Dos museos imperdibles
Dos museos únicos en el mundo, el primero cuenta la historia del azulejo en Portugal, desde sus primeras aplicaciones en paredes desde el siglo XVI hasta nuestros días. El segundo cuenta con una colección de coches inimaginables, con excelentes ejemplares del siglo XVIII, decorados de manera muy exuberantes con pinturas y talla dorada.
Visitar el Museo de Arte Contemporáneo y Los Miradores de la Ciudad
Es un maravilloso museo en donde encontrarás obras de Wharhol, Picasso, Dalí, Duchamp y Pollock. Puedes visitar los diferentes miradores de la ciudad y obtener las mejores vistas que te pueden ofrecer, como el de Santa Luzia, Porta do Sol, Sao Pedro de Acantara y muchos más.
Como puedes ver Lisboa es una de esas ciudades que te enamora y envuelve en cada paso que das por sus preciosas calles, plazas y monumentos, y sin mencionar lo que sientes al degustar su divina comida y su pastelería, por esto y más no debes por ningún motivo dejar de visitarla y conocerla, vamos, no esperes más te aseguro que querrás volver a ella una y otra vez.
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En mi ultimo viaje a espana , tuve que hacer escala en lisboa estuve dos días por esa ciudad y me enamore a primera vista. Desde que el avión empezó a hacer maniobras para aterrizar y la ciudad se veia tan de cerca por la ventanilla fue una vista muy linda la que aprecie una ciudad maravillosa y un destino casi que obligatorio para viajar.