Dicen que el Empire State es el edificio más fotografiado del mundo. Pocos saben que a partir de las diez de la noche hay un saxofonista que toca gratis en el piso 86, donde los turistas sacan fotos panorámicas de Nueva York y se ponen románticos pidiendo besos a sus parejas en un edificio que mide 443 metros (contando la antena!).
Durante nuestra estacia en Nueva York, Arol y yo decidimos subir al Empire Estate para ver el atardecer sobre Manhattan. No tuvimos mucha suerte y lamentablemente, fue una puesta de sol bastante nublada, así que la luz apenas se reflejó en los edificios pintándolos de colores rojizos y rosados. Pero la verdad es que no importa mucho porque las vistas son espectaculares.
Durante casi dos horas, fuimos girando alrededor de la plataforma de observación y buscando lugares conocidos para nosotros en Nueva York: el puente de Brooklyn, la Estatua de la Libertad, el edificio Flatiron con su característica forma de plancha, el Chryssler con su cúpula tan especial, Central Park, Times Square… Todo parece muy pequeño, casi minúsculo, desde el piso 86 del Empire State. Y es inevitable recordar todas aquellas pelis de ciencia ficción en las que una explosión gigante destroza al cuarto rascacielos mas grande de los Estados Unidos… o pensar en King Kong!
El Empire Estate está en la Quinta Avenida con la calle 34 y subir hasta el piso 86 cuesta 29 dólares por persona. Si quieres y puedes pagar un poco más, también puedes subir al piso 102, pero nosotros pensamos que no merecía mucho la pena ya que estás todo el tiempo detras de un cristal y es un espacio mucho más reducido que en el piso 86, así que en diez minutos ya te habrás cansado de dar vueltas alrededor.
Y ahora, el truco viajero nacido de una anécdota. Podéis comprar las entradas por internet si queréis o comprarlas dentro del edificio, en el segundo piso. No las compréis nunca fuera del edificio a personas vestidas con un uniforme que juran ser empleados del Empire State. Llevan una acreditación con fotografía y te cuentan que están ahí para evitar que se formen colas enormes en las taquillas, de hasta una hora y media.
Nosotros confíamos en ellos y nos vendieron las entradas para subir al piso 86, a un módico precio de 61 dólares cada una. Nos pareció un poco caro y le preguntamos varias veces si las mismas entradas, dentro del edificio costaban lo mismo y si eran las que únicamente te dejan acceder al piso 86. El amable vendedor nos juró y perjuró que ese era el precio y que si queríamos, nos acompañaba dentro para ver que había los mismos precios que nos estaba cobrando él. Le dijimos de buen rollo que no hacía falta y pagamos con nuestra tarjeta. Pero teníamos la mosca detrás de la oreja, así que fuimos nosotros solos a las taquillas que hay en el segundo piso, solo «por si acaso». Efectivamente, llegamos allí, y las entradas costaban 29 dólares por persona. El «amable vendedor» nos había colocado entradas que incluyen un simulador donde ves Nueva York desde el cielo, más conocido como «Sky Rider»… que es la empresa para la que él trabajaba realmente.
Evidentemente, nos enfadamos muchísimo y volvimos al lugar donde el vendedor callejero nos había parado. Le dijimos que nunca nos mencionó nada del simulador y nosotros le pedimos en todo momento bien clarito que sólo queríamos subir al piso 86. Era un vendedor mentiroso y él mismo lo reconoció: nos dijo «relax» y nos hizo una devolución del dinero en el mismo momento. Evidentemente nosotros ya no nos fiábamos un pelo así que le pedimos copia del recibo de devolución, lo revisamos delante de él y nos fuimos a comprar los tickets a las verdaderas taquillas.
Así que, lectores viajeros, aprended de nuestra inocencia y comprad sólo los tickets dentro del Empire State!
Las vistas desde el Empire State Building son alucinantes. Nosotros subimos al ESB por la mañana y al Top of The Rock por la noche para tener las vistas del ESB iluminado. 100% recomendable. :)
y las filas para comprar sí son de muchas horas?
No llega a las horas pero sí se trata de una espera que puede ser algo larga y te quita de hacer cosas en tus vacaciones