
Algunas veces, te contamos viajes a grandes destinos que encandilan y llaman la atención desde el primer minuto. Nueva York, India, Israel… ¿quién no se muere de ganas de visitar estos lugares? A nosotros nos encanta ir a zonas remotas y traerte las mejores recomendaciones, fotos y alguna anécdota divertida.
Sin embargo, nuestra filosofía viajera entiende que no hace falta recorrer muchos kilómetros para estar de viaje: a veces basta con ponerte la mochila e ir a descubrir tu propia ciudad tomando una perspectiva trotamundos.

A finales de 2018 unos amigos nos invitaron a su boda, que celebraron en un pueblo del norte de Inglaterra. Alnwick está a 130 kilómetros de Edimburgo y no destaca especialmente en la ruta turística tradicional… pero nuestro espíritu aventurero pudo más que los rumores y decidimos que después de ir a la boda, nos quedaríamos unos días recorriendo el norte de Inglaterra.
[alert type=»info» dismiss=»no»] No es el típico sitio que sale en las guías, pero es un lugar que tiene su encanto. [/alert]
Mientras empezaba a planear el viaje yo pensaba si aquello era una buena idea, si habría suficientes cosas que ver y hacer… Hoy te puedo asegurar que fue una escapada preciosa por la zona inglesa que limita con Escocia y aquí me tienes, lista para darte un montón de valiosas recomendaciones porque esta ruta viajera se sale de lo tradicionalmente turístico: ¡Ven con nosotros a descubrir el norte de Inglaterra!
Visitando Alnwick y sus alrededores
Nuestra base se situó en el pueblo de Alnwick, un lugar pequeño pero con mucho encanto y bastantes cosas para hacer. Los alojamientos tienen un precio medio y nosotros nos quedamos en un bed and breakfast que incluía desayuno en el precio: The Georgian West House.
[alert type=»info» dismiss=»no»] Si viajas por el norte de Inglaterra o buscas una escapada desde Edimburgo, es una buena alternativa. [/alert]
Una vez instalados en Alnwick, empezamos a explorar sus calles y lugares típicos. Las dos cosas que no te puedes perder en tu paso por Alnwick son:
El Castillo de Alnwick
Es uno de los castillos mejor conservados de Reino Unido y su tamaño es increíble. Destaca porque es uno de los pocos castillos que todavía está habitado por la familia noble que lo posee: en este caso, los Duques de Percy.

A pesar de que siempre ha sido un monumento muy importante de Reino Unido, este castillo se ha hecho mucho más famoso últimamente gracias a Harry Potter, y es que varias escenas de la película salieron de los patios de este lugar.
Si te gusta Harry Potter puedes descubrir un poco más en los tours que se organizan por los castillos ingleses con un guía en español. Puedes ver un poco más aquí.
Y como en los viajes, no siempre sale todo bien, ¡resultó que durante nuestra visita el castillo estaba cerrado!
[alert type=»success» dismiss=»no»] El castillo es un sitio genial para los amantes de Harry Potter. [/alert]
No pudimos verlo por dentro, así que nuestra recomendación es que consultes horarios y fechas de apertura antes de ir a visitarlo, para no llevarte una decepción como nos pasó a nosotros.
Aunque, pensándolo bien, ¡nos da la oportunidad de volver a visitar Alnwick!
La librería más bonita del mundo: Barter Books
Un día de estos nos haremos famosos por ser el blog de viajes que más posts de librerías tiene entre sus archivos. El Ateneo de Buenos Aires, la librería Shakespeare en París, Irmaos Lello en Oporto… más que tiendas son templos consagrados a la literatura universal y nosotros no podemos resistirnos.

Nos encanta leer y nos gustan mucho los libros, así que en todos nuestros viajes terminamos revolviendo entre las estanterías de alguna de las librerías locales y no solemos salir con las manos vacías.
[alert type=»info» dismiss=»no»] Es el sitio donde nació la frase “Keep Calm and Carry On” [/alert]
Gracias a nuestro viaje a Alnwick descubrimos la que puede ser la librería más bonita del mundo: Barter Books, que vende libros de segunda mano.
Se trata de una librería gigante, donde nació la tan británica expresión de “Keep Calm and Carry On”. Por si eso fuera poco, tiene una preciosa chimenea en su interior, sofás para que puedas sentarte a disfrutar de un libro (incluso antes de comprarlo), y trenes eléctricos que recorren el techo de algunas de las estancias de la librería.

Este es un claro caso de que “una imagen vale más que mil palabras”, así que te dejamos con algunas fotos para que disfrutes. La visita es gratuita y merece mucho la pena, pudiendo incluso tomar un café o comer algo ligero en el restaurante que tiene en su interior: en Alnwick fue nuestra segunda casa.


